lunes, 2 de diciembre de 2013

RUTA A LA MURALLA CHINA.

Aprovecho otro de esos días en mitad de la semana en los que el trabajo me permite tomar un descanso para inventarme una ruta motera que me lleve al fin del mundo, pero eso si, volviendo por la noche a casa a cenar.

Escribo en un papel el nombre de cinco o seis pueblos, cojo los guantes y el casco y bajo como un rayo al garaje.... ojalá pueda volver a tiempo porque de lo contrario tendré bronca en casa.

Esta vez intentaré llegar nada más y nada menos que a la Muralla China.


Como a muchos de vosotros, no hay nada que me relaje más que rodar por una carretera de curvas y enlazar unas con otras en un suave baile.


Ante mi se presenta una tarde preciosa con unas vistas envidiables.


Llego, sin tocar las rectas de la autovía, hasta Torrelaguna y como es la hora del café no dejo pasar la oportunidad de parar en un conocido bar de esta localidad.


Me tomo tranquilamente el café pensando la ruta que puedo hacer enlazando los pueblos que tengo apuntados en la hoja sobre el depósito de gasolina.


No me como mucho la cabeza, he salido a rodar y relajarme, hasta donde llegue he llegado, no me marco objetivos...bueno solo uno: disfrutar de la tarde subido en la moto.

Primeras curvas y dejo atrás el desvío al embalse del Atazar.


El otoño impone su ley y colorea de amarillo los árboles.


Llego a el Berrueco y paro en su Plaza Mayor junto a "la picota" (lugar donde se exponían los cuerpos de los reos ajusticiados).


Continuo mi camino bordeando parte del embalse del Atazar al que le queda poco para llenarse.


Esta es una zona donde abundan los embalses y las presas por lo que me desvío unos metros en mi ruta para visitar el embalse del Villar y dar un vistazo a ambos lados de la presa.



Retomo la ruta que me he marcado y llego a otro pueblo serrano: Mangirón.


El nombre de este pueblo proviene del árabe y viene a significar "buen agua"


Y no es de extrañar pues el agua en esta zona de la sierra es abundante y de una calidad fuera de toda duda

Un semáforo en rojo me hace parar, es el semáforo que regula el paso alternativo sobre la presa de Puentes Viejas.


Un estrecho carril asfaltado pasa sobre la parte alta de esta presa



El ritmo relajado que llevo me permite descubrir secretos escondidos propios de la Guerra Civil.....


...y restos de antiguos trabajos como la recolección de miel, gracias a rústicas colmenas mimetizadas con la montaña.


Sigo cruzando pueblos diseminados por esta Sierra Norte, como Prádena del Rincón donde paro junto a su viejo y en desuso Potro de Herrar


Mi potro rodante tiene las herraduras en buen estado por lo que continuo hasta el siguiente pueblo:
Montejo de la Sierra.

Salgo de Montejo dejando para otra ocasión la visita al Hayedo de Montejo y no paro de subir y subir hasta llegar al Puerto de la Hiruela.


Toda la Sierra Norte ante mi y para mi solito.



La verdad es que esta afirmación la tengo que matizar porque hubo varios momentos en mi ruta en los que estuve acompañado por otros habitantes de la montaña.




Me llevé una grata sorpresa de lo bien conservadas que están las carreteras en esta zona, hace muchísimo tiempo que no vengo por aquí y las recordaba en peor estado.

A partir de Corralejo todo cambia, el GPS me dice que circulo campo a través, las señales en la carretera me indican que el camino está cortado, yo sigo hasta donde pueda porque mi objetivo se que está muy próximo.

Y aparece ante mi La Muralla China.



No se escuchaba ningún ruido, no pasó ningún coche, el tiempo se paró durante 10 minutos para disfrutar de ese momento.

Cuando terminé mi "momento-meditativo", rompí el silencio del entorno con el sonido del motor de mi Paneuropean y el traqueteo de los plásticos crujiendo al rodar por este pavimento de cemento rayado.


Antes de que las horas de luz se acaben, y aprovechando que la Muralla China me deja al lado, voy a visitar otra de las zonas que tengo pendientes de conocer mejor.


Paso por Majaelrayo que es uno de los pueblos más visitados en esta ruta de los Pueblos Negros.


Esta zona de Guadalajara en plena Sierra Norte, ha aprovechado los recursos y materiales del entorno para levantar construcciones basadas en la abundante pizarra propia de la zona




El color negro de la pizarra en paredes y tejados de los pueblos de esta comarca da nombre a la ruta.



Ya de vuelta a casa, me paro en la Ermita de los Enebrales, lugar que daba auxilio a peregrinos y caminantes.


La Iglesia de la Asunción me recibe nada más entrar en el pueblo de Tamajón


Y una puesta de sol de lo más romántica fue la que puso punto final a la ruta.


Hasta la próxima.

PD: llegué a tiempo de cenar en casa, la Muralla China está más cerca de lo que parece.

4 comentarios:

  1. Me alegra ver otra perspectiva de la famosa ruta de La Muralla china.
    Aquí te dejo otra versión, pero en este caso de la mano de una moto de trail.
    http://paseostrankitrail.blogspot.com.es/

    Un saludo y gracias por compartir.

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  2. Hola Jose, ayer hice una ruta con Ayuso, y sin saberlo nos metimos en la "Muralla China", aunque la hizo sin respiración finalmente la superó con su RT, jeje. Lo cierto es que le metí una ruta pintoresca pero GS casi total incluyendo una carreterita que pasa por el Vado muy trail, jeje. Eso sí, fue sin querer ya que no la conocía y la hice siguiendo indicaciones de la guía.

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  3. Gracias por compartir, me ha animado a visitarla. Lo intentaré éste viernes. :)

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